Écija - Carretera del Rubio - Camino del Lámpara (camino de Herrera) - Cortijo del Borreguero -
Cortijo de los Mutimentos - Hierba y terrones (para hacer piernas) - Camino de Herrera -
Cortijo del Cambroncillo - Cortijo de García González -
Camino de Herrera - Carretera del Rubio - Écija
Cercanas al Cortijo del Borreguero, fundado en 1565, están las Salinas de la Torre o Salinas Mayores o de Suso, ya mencionadas en el Repartimiento de 1263, junto al arroyo del Saladillo, del que se abastece. Una noria movida por caballos extraía la salmuera de un pozo salado donde se concentraban los veneros de agua salada. También se localizan en esta zona las propias Salinas del Borreguero.
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Más escabrosos son los datos sobre el Cortijo de los Mutimentos, lamentablemente, pues fue escenario de un sonado crimen, según recoge el ABC del 8 de septiembre de 1923: http://hemeroteca.abc.es/cgi-bin/pagina.pdf?fn=exec;command=download_stamp;id=0000135888;nombre_pdf=ABC-28.09.1923-pagina%20016;path=H:%5Ccran%5Cdata%5Cprensa_pages%5CMadrid%5CABC%5C1923%5C192309%5C19230928%5C23S28-016.xml
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Según el artículo de José Luis López Soto publicado en el Boletín Confalonero del año 200, la imagen del Cristo fue encontrada en este pozo de Los Mutimentos. Este pozo, centenario, está construido únicamente con piedras dispuestas unas sobre otras, sin utilizar ladrillos.
Cuenta la leyenda que unos campesinos intentaban sacar agua del pozo pero la cuerda estaba atascada en el fondo. Probaron unos y otros, y sólo conseguían hundirse más y más en el barro, así que se les ocurrió la idea de quitarse los zapatos, para que el barro acumulado no dificultase la tarea. Una vez descalzos, la cuerda subió con una pasmosa facilidad, y los campesinos quedaron asombrados al ver la imagen del Cristo que habían sacado. Por esto es por lo que los portadores del trono realizan la estación de penitencia descalzos.
Parece ser que los campesinos quisieron transportar la imagen en una carreta hasta El Rubio, pero el buey no daba su brazo a torcer hasta que no giró camino de Écija, y fue imposible que lo recondujeran. Por ello, los campesinos pensaron que fue deseo expreso de Dios de que la imagen llegara a nuestra ciudad. Para más inri, el animal se detuvo justo a las puertas del Convento de la Victoria, donde se le rinde culto hoy en día, y allí dieron refugio a la comitiva, pues habían sido sorprendidos por una gran tormenta.
Según se halla en la documentación del Cabildo del 1 de mayo de 1857, nuestra ciudad atravesaba una gran sequía, motivo por el cual quisieron sacar en procesión al Cristo de Confalón. El 3 de mayo, cuando se iba a iniciar la procesión, empezó a llover abundantemente, con lo cual se retrasó la hora de salida. Más tarde, consiguieron realizar medio recorrido, pero comenzó a llover de nuevo y tuvieron que resguardarse en una iglesia. Movidos por el fervor, salieron de nuevo a la calle aun con la que estaba cayendo. Cuando volvieron al templo y se dispusieron a hacer balance de los daños por la lluvia, descubrieron que los elementos principales no tenían señales de haberse mojado.
Fuente: Ayer y hoy de las Hermandades y Cofradías Ecijanas. Por D. Ramón Freire Gálvez Taller Gráfico Codiar: SE-804-2002. Libro sobre las Hermandades de Écija
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| Como la ruta hoy nos parecía suavecita, aprovechamos para hacer piernas a través de la hierba y los terrones |
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| Que yo os juro que he enfocao el camino por donde hemos venido, pero ahora no aparece, xDDD. |
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| Foto: Jose |
6 de los 7 niños de Écija
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| Foto: Jose |
De izquierda a derecha (espero no errar): Javi, Ricardo, Enrique, Juan, Salvi e Isra.
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| Aquí está el niño de Écija que faltaba: Jose. |
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| Cortijo del Cambroncillo (no sobra ninguna "eme", no) |
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| Javi allanando moradas |
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| Aquí vemos una imagen corporativa de Quasimodo, que se aberroncha contra el rocaje vivo del Cambroncillo |
